Pese al desempleo, un albañil regresó el dinero que se hallado entre escombros; hoy es recompensado Buenos Aires, Argentina.- En medio de las cenizas de un comerció consumido por las llamas, un albañil encontró una cuantiosa cantidad de dinero que decidió regresar a su legítimo, en lugar de usarlo para cubrir las necesidades que él y su familia presentaban; hoy, su honestidad y buena obra son recompensadas con el cumplimiento de su más grande anhelo. Todo comenzó cuando a Saúl Jiménez de 31 años de edad le ofrecieron un empleo temporal, el cual consistía en limpiar un local comercial siniestrado. Sin empleo y con cuatro hijos, el originario de la provincia de Mendoza, no dudó en aceptar, mientras surgía la oportunidad que tanto esperaba; tener un empleo permanente que le diera lo necesario para vivir sin carencias económicas. Sin embargo, su mundo dio un vuelco cuando encontró 250 mil pesos argentinos, que equivale a 76 mil pesos mexicanos, envueltos en un paquete que los mantuvo en perfecto estado.Pese a que el dueño de este dinero ya lo había dado por perdido y que era suficiente para vivir sin penas una temporada, Saúl hizo lo que pocos harían. Sin pensarlo dos veces, Saúl regresó el dinero y su buena acción se volvió viral en las redes sociales, el hombre al que le benefició su acción lo dio a conocer durante la semana pasada. «Mis queridos amigos… Quiero que vean a esta persona se llama Saúl Jiménez… Encontró entre los escombros dinero… Sin dudarlo fue y me lo entregó… Alvear tiene muy buena gente… Saludos a todos… Después les sigo comentando”, escribió el hombre agradecido por el dinero. Esta historia, lejos de quedar en el olvido, llegó a las autoridades de Mendoza, quienes mandaron a llamar al obrero para recompensarle de la mejor forma posible. Saúl, no pidió nada material o económico por su acción, solo solicitó que le ayudaran a conseguir un trabajo para poder mantener a su familia. Fue así que le ofrecieron un puesto en el ayuntamiento de su localidad, para que pudiera ganarse la vida de una forma decente y honrada, como él tanto anhelaba